miércoles, 24 de enero de 2007

De excursión con "Los Quejicas"

Tras un parón de un mes por culpa de los exámenes, he vuelto al día a día de siempre y como no… a las excursiones con “Los Quejicas”.
Este pasado domingo salimos con los nanos a dar una vuelta por la Sierra de Espadán. Concretamente decidimos ir a Alcudia de Veo, para dar un pequeño paseo hasta el pueblo abandonado del Jínquer. Además conseguimos recuperar a un viejo amigo como Angel Marín y su esposa Estrella, así como convencer a Alberto y a Rosana junto con su pequeña Alejandra. Esperemos que no se arrepientan y vuelvan otro día. Junto a estas líneas he colgado la foto oficial del evento. Sólo faltan María Angeles y Alberto, ambos cámara en ristre.
A petición popular, retrasamos la hora de salida en 30 minutos, lo cual unido a los 30 minutos que siempre tardamos en ponernos en marcha y el tiempo de viaje, hizo que llegáramos a nuestro destino tarde, muy tarde.
Salimos del pueblo un poco desorientados, pues el camino no está indicado y tardamos en encontrarlo. Eso sí, el tiempo era bueno de verdad y el camino una delicia: una pista ancha entre campos de olivos y almendros en flor. Al cabo de 50 minutos de marcha y ya por una pista aérea sobre el barranco y por dentro de un pinar decidimos parar en el camino a almorzar. Creo que fue lo más celebrado del día.
Como ya era tarde y había gente que tenía que volver a casa, continuamos 10 minutos y nos dimos la vuelta sin llegar al pueblo del Jínquer. Fue una lastima, pues nos quedamos a solo 300 metros. Pero bueno, lo importante es salir de vez en cuando al campo y que los nanos respiren ese ambiente de montaña desde pequeños. Yo por lo menos lo necesito.
Ah, se me olvidaba... Para finalizar fuimos a comer a Chovar y darnos un pequeño homenaje. Madrugar no madruga nadie, pero lo que es comer, si fuera a las 6 a.m., seguro que ninguno se retrasaba.

Saludos amigos

5 comentarios:

angel marín dijo...

Efectivamente, fué un día fabuloso, despejado, que nos permitió saborear el solete de enero plácidamente.
Los niños se portaron bien, y hasta me permitieron hacer algún número de malavarista (Los prejubilados, que no tenemos que currar en el BSCH, a veces hasta podemos ensayar números de circo, claro. ¡Eso se creen algunos!).
Y es más, hasta llegamos a cantar en grupo, ante el asombro de Marina, aquello de "Ahora que vamos despacio..." y otros temas del hitparade del excursionismo.
La comida bien pero (como casi en todas partes) son unos tardones, y entre plato y plato haces la digestión.
Con niños y todo éramos 20. ¡Una gran familia!
Saludos
Angel Marín

Anónimo dijo...

Así es, lo pasamos muy bien y con muy buen tiempo que, para los frioleros como yo, es bastante importante.Decirle a Pedro que seguro que volvemos, pero os aseguro que el tamaño de mi mochila se va a reducir considerablemente la próxima vez,(soy la primera por la izda.visto de frente, con mochilón amarillo), porque en lugar de hacer una excursión parece que me voy a escalar el Everest(y todo por hacerle caso a mi marido,que como es maño y montañero de Pirineos "de tota la vida", se cree que la Sierra de Espadán va a ser como El Monte Perdido.)Y ya se sabe, como caben cosas vas metiendo "por si acaso", y la mochilita pesaba más que yo.Por cierto,Pedro,por lo de madrugar no te preocupes, no hace falta que insistas mucho...ja ja ja.
No tardes en organizar otra, bueno, espera a que pase el temporal.
Besos.
Rosana Galán

Anónimo dijo...

Pues me alegra que os lo pasasteis bien. Angel, la próxima vez llevaré la letra de la canción para cantarla todos.
Rosana, comprate una mochila de 20-25 litros, y con cintas para abrocharla delante. Con eso y el hueco del portabebes, tendréis suficiente para excursiones como esta.
La próxima excursión será el día 11 de febrero en principio y la idea es ir a El Charco Azul que está en Buño. Ya avisaré con tiempo.
Saludos
Pedro

Pedro J. Martínez dijo...

Fijate Rosana si la mochila es grande, que mi mujer ha preguntado si iba la niña dentro (no es coña)
Saludos
Pedro

Anónimo dijo...

Las críticas a la mochila son totalmente infundadas. Si queremos que quepa el almuerzo (Tupperware de pechugas, lata de Fanta Naranja -sí, hay excursionistas que no se limitan a una cantimplora con agua-, el almuerzo de la niña (yogurt, petit suisse...), agua (para los excursionistas d everdad) y un poco de ropa adicional por si acaso (recuerdo que Rosana es una de las personas más frioleras del mundo), no nos podemos conformar con un bolso de bandolera, ni con una mochila de maricas como llevaba el resto. Por otro lado, es absolutamente falso que pesase más de 15 kilos, como se viene comentando por ahí. ¿O acaso Rosana es como una hormiga, que puede llevar la mitad de su peso a la espalda?